El empresario y hotelero que ha comprado Thomas Cook Northern Europe por 600 millones de euros, Petter Stordalen, y que pasa a denominarse Ving Group, ha garantizado 400.000 plazas de este mercado en Canarias, de ellas 250.000 en Gran Canaria. Estas plazas aéreas del mercado escandinavo se mantienen en Canarias tras la quiebra de la compañía británica.
Las declaraciones del multimillonario empresario han sido realizadas en el transcurso de una rueda de prensa acompañado por el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), José María Mañaricua, en el hotel Gloria Royal Hotel & Spa de Mogán.
El empresario que encabeza Strawberry Group ha comprado el Grupo Ving que tiene un 40% de la operación, con el apoyo de Altor Fund (40%) y TDR Capital (20%).
Como ha explicado Stordalen, pretende “traer más negocio a Canarias” e introducir “su concepto de hotel”, así como “trabajar con propietarios locales”.
La unión de esta filiar a Ving Group ha garantizado, como ha expresado el empresario, que “todos los clientes que tenían su viaje comprado mediante depósito vuelen”, así como “la deuda con los hoteles” de la que, “el día 1 se pagaron 60 millones de euros”.
El grupo Ving tiene propietarios nórdicos, que para el Ving Group “es muy importante” y “siempre ha obtenido beneficios, al tiempo que posee clientes satisfechos”, ha señalado.
Actualmente ha invertido "600 millones de euros. La operación "no ha terminado", ya que hay partes del grupo Thomas Cook que "aún están por resolver", dentro de la operación que tiene prevista, ha indicado.
Asimismo, ha mostrado su satisfacción “por haber hecho esta inversión” a la que pujaban “otras 20 empresas”. Finalmente, como ha detallado, la compra ha sido para Stordalen por su interés “en el grupo al completo, aerolínea y empleados”.
De esta forma, el grupo traerá "400.000 clientes a Canarias", cuyas "ventas se han incrementado con esta operación” y "están por encima de las del año pasado”.
Del mismo modo, se ha declarado "muy orgulloso de su vínculo con Ving", que es un grupo “de primera categoría mundial”. Como ha insistido, "vamos a crecer, con más clientes, negocios", porque "está en el ADN de la compañía crecer y expandir", y vincular a sus 2,2 millones de clientes de su programa de fidelidad.
Ya se encuentra en un proceso de “renovación de toda la flota de aviones” y la lógica “es seguir sumando en clientes”, porque “la gente está viajando más” y eso es una garantía de crecimiento del turismo nórdico.
La empresa que lidera “crece cada año” y como ha asegurado el turismo también ya que “la gente cada vez viaja más y las nuevas generaciones lo harán más aún”.
La mejor noticia
Por su parte, José María Mañaricua, ha explicado que la "supervivencia y la apuesta por el destino de Petter Stordalen" es "la mejor noticia de esta temporada".
Para Gran Canaria y para el Turismo, la parte más importante "era esta, la nórdica", y que "perviva en el tiempo es clave para la temporada de invierno". Para Gran Canaria la parte británica “supone 13.000 asientos", pero la nórdica "son 250.000 solo en invierno para Gran Canaria”, ha explicado.
Como ha expresado "es un hombre de negocios, hotelero, con 206 hoteles y construyendo 27 en la actualidad", que "conoce la industria turística y va a casar su grupo y el plan de fidelidad con la aerolínea”. Para Mañaricúa “Stordalen compra para quedarse y fundirlo con su empresa y pervivir en el tiempo".
El presidente de la patronal considera que se trata de una apuesta decisiva” que permite que Canarias "mantenga 400.000 asientos en Canarias” y por tanto "mantener el empleo, confianza y el mercado escandinavo", que es un nicho "de calidad y con mayor tarifa”.
Esta inversión supone "la pervivencia de la empresa", y que "la temporada de invierno se haya salvado”. De no ser así “además de la perdida actual de 250.000 plazas de Europa a Gran Canaria este invierno, se hubieran perdido “otras 250.000 más de grupo Thomas Cook Northern Europe”.
Thomas Cook ha ganado un juicio por una falsa intoxicación alimentaria de dos clientes del Touroperador. Deborah y Paul, una pareja que pasaba sus vacaciones en Mallorca con sus hijos, alegaron que habían sufrido intoxicaciones alimentarias en el año 2015 y 2016.
La pareja reclamaba por dichas enfermedades a la compañía de viajes Thomas Cook 20.000 libras esterlinas por coste de vacaciones y compensación por desorden de su salud.
Estas falsas denuncias por intoxicación, se han incrementado considerablemente en los últimos años. De haber tenido un resultado fructífero, Thomas Cook habría tenido que pagar 28.000 libras en concepto de gastos legales.
Durante el juicio, se aportaron pruebas de que la familia, demandada por el Touroperador, había disfrutado de sus vacaciones, llegando incluso a poner en sus redes sociales ‘’De vuelta a casa seguros, después de dos semanas de sol, risas, diversión y lágrimas. Nos encontramos con todos nuestros encantadores amigos que han hecho que nuestra vacaciones sean fabulosas’’.
Tras haber sido condenados por la Corte de Liverpool, la pareja condenados a prisión admitieron su culpabilidad. A la hija de ambos, Charlene, se le retiró durante el juicio los cargos de fraude.
Este es un ejemplo de la complejidad y seriedad del problema al que nos enfrentamos. Según las palabra del portavoz de Thomas Cook ‘’Por eso tuvimos que adoptar una posición firme, para proteger nuestra oferta vacacional y a nuestros clientes, de la minoría que engaña al sistema’’.